Las aerolíneas suspendieron sus operaciones hace una semana, siguiendo el aviso de las fuerzas aéreas estadounidenses debido a la escalada militar en la región.
El tráfico aéreo en Venezuela ha estado paralizado desde que la Fuerza Aérea de Estados Unidos emitió una alerta el lunes, señalando los riesgos de volar sobre el país por la intensa actividad militar y el deterioro de la seguridad. Aerolíneas como Iberia, Air Europa, Latam, Avianca, TAP, y Turkish Airlines tomaron la decisión de suspender sus vuelos. Aunque este sábado algunos aviones, principalmente de menor tamaño, continuaban operando, la mayoría de las rutas comerciales están actualmente inactivas, según Flightradar.
Anuncio de cierre del espacio aéreo
En un mensaje publicado en su red social Truth, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió que el espacio aéreo de Venezuela permanecerá cerrado “en su totalidad”. Esta declaración ha generado preocupación sobre la posibilidad de un ataque militar inminente. Trump instó a aerolíneas, pilotos y miembros del crimen organizado a respetar la prohibición de volar sobre Venezuela, aunque no proporcionó detalles sobre la implementación de dicha medida.
Reacción del gobierno venezolano
El Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC) de Venezuela había dado un plazo de 48 horas a las aerolíneas para reanudar sus operaciones, de lo contrario, se les revocarían sus licencias. Sin embargo, debido a la inacción de las compañías, el gobierno venezolano ha decidido anular los derechos de tráfico aéreo para varias de ellas. El ministerio de Transporte acusó a estas aerolíneas de sumarse a lo que denominaron «terrorismo de Estado» promovido por Estados Unidos.
Escalamiento militar por parte de EE. UU.
La situación se complica con el despliegue militar más grande en la región en generaciones, con más de 15,000 efectivos estadounidenses cerca de Venezuela. Esta medida, que incluye el uso del portaviones USS Gerald R. Ford, se considera un punto de inflexión en el conflicto entre ambos países. Trump anunció que pronto comenzará a interceptar a narcotraficantes en tierra, en un intento de reducir el tráfico de drogas que asocia al gobierno de Maduro.
Hostilidad diplomática
A pesar de un reciente intercambio telefónico entre Trump y Maduro, en el que se discutirían posibles encuentros y negociaciones, las tensiones permanecen. Trump ha registrado a Maduro y a varios miembros de su gobierno en la lista de terroristas, lo que fortalece la posición de Estados Unidos para eventualmente intervenir militarmente.
La creciente hostilidad no solo afecta a las relaciones diplomáticas, sino también a la situación económica y social en Venezuela, que sufre un profundo aislamiento internacional. Las operaciones aéreas se encuentran en un limbo, mientras las medidas estadounidenses siguen afectando la viabilidad de las aerolíneas en el país.
