Homicidio de una brasileña en Buenos Aires: el ataque que conmocionó la avenida Corrientes
El centro de Buenos Aires, y en particular la emblemática avenida Corrientes, es conocido por su vitalidad y seguridad. Sin embargo, un trágico suceso ha alterado esta percepción. La Justicia argentina investiga el homicidio de María Vilma das Dores Cascalho da Silva Bosco, una brasileña de 69 años, que fue víctima de un ataque violento el pasado jueves 6 de noviembre.
El ataque y sus repercusiones
María, oriunda de Itapuranga en el estado de Goiás, había llegado a Argentina para visitar a su hija, estudiante de Medicina en la Universidad de Buenos Aires. Según informes policiales, mientras caminaba por la avenida Corrientes, un hombre se le acercó y la golpeó «sin motivo aparente». El brutal ataque provocó que la mujer cayera al suelo, sufriendo un traumatismo cráneoencefálico que resultó fatal, a pesar de los esfuerzos de los servicios de emergencia para trasladarla a un hospital cercano.
El agresor y su historial
Las autoridades lograron capturar al agresor, un hombre de 30 años con antecedentes penales por robos y problemas psiquiátricos, pocas horas después del ataque. Este individuo ha sido acusado de tentativa de homicidio. La Policía de Buenos Aires indicó que el atacante, que había sido internado en centros de salud mental en varias ocasiones, actúo sin provocación y no con intención de robo, lo que refuerza la naturaleza aleatoria de la violencia que sufrió Cascalho da Silva.
Reacciones y próxima repatriación
La noticia de su fallecimiento fue difundida ampliamente, y la familia ha solicitado celeridad en los trámites para repatriar su cuerpo. Para facilitar el traslado, han organizado una colecta a través de redes sociales. Excompañeros de María la recordaron como una persona generosa y comprometida, quien había dedicado su vida laboral al Tribunal de Justicia de Goiás y había planeado regresar a Brasil en las próximas semanas.
Perspectivas legales
El detenido ha sido recluido temporalmente en el hospital psiquiátrico Borda, mientras las autoridades judiciales evalúan su estado mental y determinan si es imputable por sus acciones. Este incidente engrosa la lista de episodios de violencia en la capital argentina, planteando interrogantes sobre la seguridad en zonas turísticas.
