En las alturas de un árbol, en acantilados de difícil acceso o cerca de cuerpos en descomposición, se encuentran los *comentócratas*, opositores que critican y cuestionan. Avanzan en círculos, alertas y vigilantes, como buitres, en busca de la carroña. Así es como la presidenta Claudia Sheinbaum ha referido a sus críticos en medio de constantes arranques de furia.
Confusión y Responsabilidad
La difícil tarea de liderar un país como México no es sencilla, y es comprensible que la presidenta sienta la presión. Sin embargo, confundir a los críticos con el verdadero enemigo podría ser peligrosa. Tanto Sheinbaum como su antecesor, López Obrador, han pasado años alimentándose de las fallas de anteriores administraciones. La estrategia de culpar a un pasado distante por los problemas actuales se ha vuelto un recurso desgastado y poco eficaz.
Inseguridad en Michoacán
La situación de emergencia en México, especialmente en estados como Michoacán, requiere una respuesta más concreta que mensajes demagógicos. La población es consciente de la creciente inseguridad y no solo recibe noticias sobre ello, sino que lo vive a diario. Esto es lo que inquieta a los ciudadanos, ya que la criminalidad ha llegado a niveles alarmantes en muchos estados.
La Frustración y el Control
Dentro de este contexto, algunos festejan la crisis de inseguridad, siempre hay quienes ven oportunidades en el descontento. La presidenta Sheinbaum está consciente de que su partido, Morena, está compuesto por figuras con diversas intenciones. Sin embargo, utilizar términos como «buitres» para referirse a sus adversarios puede reflejar una falta de control sobre la situación y una desesperación por encontrar soluciones efectivas.
La Criminalidad y su Denominación
Resulta curioso que la presidenta reserve el término «delincuentes» para referirse a los criminales, sin calificaciones que describan la gravedad de sus acciones. No los denomina asesinos, monstruos o terroristas, aunque su accionar es incuestionablemente devastador. Es importante recordar que quienes cometen estos delitos no son solo adversarios políticos; son miembros del crimen organizado, que aterran a la población, extorsionan negocios y venden el terror en las calles.
Reacción ante la «Guerra de Calderón»
Cuando Sheinbaum pregunta si se desea el regreso de la «guerra de Calderón», la respuesta es un rotundo no. Lo que la población realmente desea es una estrategia clara sobre cómo manejar la violencia actual y qué planes tiene para «pacificar» Michoacán. Este término sugiere un conflicto armado, lo que llama la atención sobre el enfoque que se debe tener frente a la creciente violencia.
Mientras tanto, los críticos seguirán en su posición, observando el desarrollo de la administración y su capacidad para abordar la descomposición en la que se encuentra el país.
@juanizavala