Impacto del Derrame de Petróleo en Álamo Temapache, Veracruz
Afectada por un derrame de crudo, la parcela de Susana Marlene Cortés Hernández, ubicada en el ejido Citlaltépetl, en el municipio de Álamo Temapache, presenta un panorama desolador. Este municipio de Veracruz es conocido por ser uno de los principales productores de naranjas en el país. En lugar del aroma fresco de los cítricos, el lugar está impregnado de un fuerte olor a gasolina. Las hojas de sus naranjos, una fuente esencial de ingresos, están ennegrecidas, y las frutas, dañadas. “Es devastador. Es mi patrimonio. Perdimos cultivos y nos quedamos sin agua”, lamenta Cortés Hernández, de 39 años.
Causas del Derrame y sus Consecuencias
El derrame se originó el 16 de octubre en el oleoducto Poza Rica-Madero de Petróleos Mexicanos (Pemex), que fue afectado por inundaciones en la zona. En las cercanías, un arroyo de la comunidad está cubierto por una espesa capa de crudo que desemboca en el río Pantepec, el cual atraviesa varios municipios antes de llegar al Golfo de México. La situación es crítica, ya que las comunidades urgen un suministro de agua limpia y recursos para reanudar la siembra.
Pese a que Pemex ha afirmado que los trabajos de contención del derrame han sido completados y que se ha iniciado el restablecimiento del suministro de agua, los habitantes siguen esperando ayuda inmediata. “Necesitamos apoyo para volver a sembrar”, claman los afectados.
Impacto en la Salud y Economías Locales
El olor agobiante que acompañó el derrame provocó náuseas y malestar en los residentes de Citlaltépetl. Cortés Hernández recuerda cómo ella y otros vecinos reportaron el incidente, pero la respuesta de Pemex llegó tarde, con las válvulas cerrándose tres horas después del aviso. «El daño ya está hecho. La cosecha que esperaba vender era de 5.000 pesos por tonelada, y solía sacar 20 toneladas cada temporada”, explica la citricultora.
El director general de Pemex, Víctor Rodríguez Padilla, ha afirmado que se indemnizará a los agricultores afectados, pero Cortés Hernández asegura que hasta ahora no se ha concretado ninguna cifra. “Lo único que me dijeron es que Pemex no tiene dinero”, añade.
Comunidades Afectadas por la Contaminación
A tan solo cuatro kilómetros de Citlaltépetl, la situación en la comunidad de El Cabellal es alarmante. Alrededor de 70 familias han perdido sus hogares y cultivos debido a las inundaciones. Mario García Osorio, agente municipal de El Cabellal, alertó sobre el derrame al 911, pero la respuesta de Pemex no fue efectiva. “Ya no hay nada, se acabó todo”, expresa García Osorio, al recordar que la vida del arroyo que solía proveer peces y agua se ha visto devastada.
Los árboles y la flora a su alrededor presentan marcas de crudo, y los campesinos señalan la falta de medidas efectivas de contención. “No se va a poder iniciar de nuevo sin agua”, afirma Francisco Hernández Hernández, de 64 años, quien ha perdido su hogar y cultivos por las inundaciones.
Demandas de Ayuda y Solidaridad
En el ejido Kilómetro 33, cerca de El Cabellal, cerca de 200 personas se manifestaron bloqueando la carretera que conecta a su municipio con Álamo. Reclaman la atención de Pemex para resolver la grave situación que enfrentan, ya que el pozo comunitario está contaminado y no tienen acceso a agua potable.
Los afectados están pidiendo soluciones concretas como la construcción de un nuevo pozo, servicios médicos y la recolección de basura. Varios habitantes expresaron su frustración ante la falta de respuestas claras por parte de las autoridades de la petrolera estatal.
Hasta la fecha, Pemex ha comunicado que ha recuperado más de un millón de litros de hidrocarburo en varios puntos afectados, pero la confianza de los habitantes en la compañía se encuentra por los suelos, dado el impacto devastador que ha tenido este derrame en sus vidas y economías.