La Historia del Ferrocarril entre Santiago y Valparaíso
A mediados del siglo XX, el tren que unía Santiago y Valparaíso era un símbolo de conexión nacional para quienes vivían en Til-Til. Inaugurado el 14 de septiembre de 1863, este tren se convirtió en un pilar de transporte para los habitantes de la región, ofreciendo una vía fundamental para llegar a la capital durante la jornada laboral y al océano Pacífico en los meses de verano.
El Viaje en Tren: Un Recorrido Nostálgico
El trayecto en tren era conocido por su comodidad, aunque no por su rapidez. La ruta entre Santiago y Valparaíso incluía un notable desvío hacia el norte, forzado por la accidentada geografía del área. A pesar de su lentitud, el viaje se hacía más ameno gracias a las opciones a bordo, como el coche comedor y los vendedores de bebidas y dulces que siempre estaban disponibles en las estaciones.
Los pasajeros disfrutaban de un paisaje cambiante: ríos pequeños, campos sembrados y túneles oscuros que ofrecían una experiencia visual única a lo largo del viaje. Sin embargo, a medida que avanzaban los años, surgieron voces que abogaban por una modernización del trayecto, proponiendo atajos como la construcción de un túnel por la cuesta de La Dormida.
Proyectos de Modernización
A lo largo del tiempo, numerosos proyectos han buscado optimizar la conexión entre Santiago y Valparaíso. En 1842, William Wheelwright ya anticipaba un recorrido de ocho horas, considerablemente menos de lo que se tardaba en aquel entonces. Con la electrificación en la década de 1920, el viaje se hizo un poco más ágil, aunque la búsqueda de un trayecto más corto persistía.
Durante los años 40, un nuevo plan prometió reducir el recorrido en 65 kilómetros, pero el proyecto no prosperó. A través de las décadas, distintas propuestas, incluyendo un tren de alta velocidad, fueron presentadas y desechadas por diferentes razones, manteniendo viva la esperanza de una conexión más rápida.
Los Intentos Recientes por Mejorar la Conexión
En 2019, un consorcio chino propuso unir ambas ciudades en 45 minutos, pero el acuerdo se disolvió. A pesar de las frustraciones, otros proyectos continuaron surgiendo. En 2022, el presidente Gabriel Boric anunció un nuevo plan que incluiría 172 kilómetros de recorrido, vinculando el Gran Valparaíso con el Gran Santiago en una hora y media. La inversión se estimó en 1.300 millones de dólares, aunque la licitación se pospuso para después del término de su administración.
Perspectivas Futuras
A medida que los proyectos se siguen atrasando, la nostalgia por el antiguo viaje en tren se intensifica. Expertos como Ian Thompson Newman mantienen la esperanza de que una variante a través de La Dormida sea viable en las décadas siguientes, aunque advierten sobre los desafíos estructurales y económicos que implique su implementación.
Por ahora, la espera continúa para aquellos que sueñan con revivir la experiencia del ferrocarril en Chile.